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La galantamina podría ser eficaz en la demencia vascular
Un estudio publicado en el número de la revista The Lancet correspondiente al 13 de abril de 2002 concluye que los pacientes con demencia vascular parecen beneficiarse del tratamiento con galantamina igual que los pacientes con enfermedad de Alzheimer.
Los pacientes seleccionados cumplían criterios de demencia vascular probable del NINDS-AIREN (National Institute of Neurologic Disorders and Stroke - Association Internationale pour la Recherche et l'Enseignement en Neurosciences), o de enfermedad de Alzheimer posible del NINCDS-ADRDA (National Institute of Neurologic, Communicative Disorders and Stroke - Alzheimer's Disease and Related Disorders Association). Mostraban asimismo evidencia de enfermedad vasculocerebral por TAC (Tomografía Axial Computarizada) o RNM (Resonancia Nuclear Magnética). El estudio se llevó a cabo desde noviembre de 1998 a junio de 2000.
De los 592 pacientes que entraron en el estudio, se asignó tratamiento con galantamina (24 mg diarios) de manera aleatoria a 396, y 196 recibieron placebo. De promedio, los que recibieron galantamina mejoraron con respecto a los del placebo en su función cognitiva a los 6 meses de manera estadísticamente significativa. Los pacientes con demencia vascular que recibieron galantamina mejoraron una media de 2.4 puntos en el ADAS-Cog (subescala cognitiva de la Alzheimer's Disease Assessment Scale), mientras que en el grupo placebo con demencia vascular la mejoría fue de 0.4 puntos. En los pacientes con enfermedad de Alzheimer que tomaron galantamina, la mejoría fue de 1.0 puntos de media, mientras que en los enfermos de Alzheimer que recibieron placebo se produjo un deterioro de 1.8 puntos de media.
Los autores concluyen que la galantamina es igual de eficaz en la demencia debida a enfermedad de Alzheimer que en la debida a enfermedad cerebrovascular.
En un editorial publicado en el mismo número de la revista, el doctor Lon S. Schneider de la University of Southern California en Los Ángeles (Estados Unidos) se muestra en desacuerdo con los autores del estudio.
En su editorial estima incorrecto asumir que, porque la comparación global de los beneficios cognitivos del tratamiento es similar en magnitud estadística al observado en otros ensayos sobre la enfermedad de Alzheimer, los efectos de la galantamina son equivalentes tanto en la enfermedad de Alzheimer como en la demencia vascular, como argumentan El doctor Erkinjuntti y sus colaboradores.
El doctor Schneider llama la atención sobre el hecho de que los patrones de respuesta en las dos categorías diagnósticas son virtualmente recíprocos: el beneficio del tratamiento en los pacientes con enfermedad de Alzheimer se concreta en un enlentecimiento de su declive, mientras que en los pacientes con demencia vascular representa una mejoría absoluta con respecto a su punto de partida.
Afirma también que los inhibidores de la colinesterasa podrían tener efectos adversos de tipo vagal (hipotensión arterial, síncope, caídas, bradicardia y otros trastornos del ritmo cardíaco) de manera más acusada que en los enfermos de Alzheimer, a causa de la mayor incidencia de enfermedad cardiovascular en los pacientes con demencia vascular.
El doctor Schneider concluye en su editorial que serán necesarios más ensayos antes de recomendar el uso de anticolinesterásicos como tratamiento de la demencia vascular.
Referencia bibliográfica: Timo Erkinjuntti et al. Efficacy of galantamine in probable vascular dementia and Alzheimer's disease combined with cerebrovascular disease: a randomised trial. Lancet 2002;359:1283-1290.
Referencia bibliográfica: Schneider, Lon S. Galantamine for vascular dementia: some answers, some questions. Lancet 2002;359:1265-1266.
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